Especialistas de África visitan México para conocer los hubs agrícolas que impulsan CIMMYT y sus colaboradores. Aquí un testimonio.

La participación activa de las mujeres rurales en los proyectos de desarrollo agrícola ha sido una pieza fundamental para impulsar la transformación sostenible en comunidades del Sur-Sureste de México, Guatemala y Honduras.

El suelo es un recurso vivo y finito del cual depende la producción de alimentos. Evitar el laboreo excesivo y reintegrar materia orgánica al suelo son prácticas esenciales para mantener la agrobiodiversidad y la producción de alimentos.

Resultados de años de investigación realizada por CIMMYT y sus colaboradores en varias regiones agroecológicas de Oaxaca permitieron obtener un menú de tecnologías validadas para la producción sustentable de maíz en el estado.

Científicos de América Latina reflexionan sobre la integración de la perspectiva de género en el diseño de la plataforma de investigación Cuautempan, Puebla, un ejemplo de cómo la investigación agronómica permite fortalecer la seguridad alimentaria y el desarrollo social inclusivo.

Investigadores de México, Bangladés, Estados Unidos, Alemania y Brasil, proyectan cómo será el comportamiento del brusone del trigo, enfermedad que se exacerba en un contexto de cambio climático. Los resultados muestran la urgencia de transitar a sistemas agroalimentarios sustentables y resilientes.

En las plataformas de investigación se buscan alternativas que permitan a los productores obtener los mejores resultados en sus parcelas, cuidando suelo y agua al mismo tiempo. Esta plataforma de Hidalgo, México, es un ejemplo de la investigación adecuada a las necesidades locales.

El 22 de abril, Día Internacional de la Madre Tierra, es una oportunidad para tomar conciencia y reflexionar sobre la importancia de impulsar la producción sustentable de granos básicos.