1. Home >
  2. Una cálida despedida en una tarde fría a dos maiceros de corazón

Una cálida despedida en una tarde fría a dos maiceros de corazón

Esperanza Esperanza Téllez Delgado, asistente del Programa Global de Maíz, trabajó más de tres décadas en el CIMMYT. Rodolfo Caballero, asistente de investigación del programa de maíz de valles altos, comenzó a trabajar a la edad de 13 años en la oficina que después, en 1961, se convertiría en el CIMMYT. Su primer trabajo fue como eventual en el programa de investigación que coordinaban la Fundación Rockefeller y el Gobierno de México. El pasado 10 de julio de 2013, sus colegas dijeron gracias y adiós a Esperanza y a Rodolfo.

Rodolfo tenía poco tiempo trabajando en el CIMMYT cuando se estableció la primera bodega de semilla en la RodolfoUniversidad de Chapingo; esa semilla después se sembró en la estación experimental San Martín del Colegio de Postgraduados. En 1966 se fundó el CIMMYT y se adquirieron los lotes de las estaciones El Batán (maíz de valles altos), Tlaltizapán, Morelos (maíz para el subtrópico) y Lindero Puebla, Poza Rica (maíz para el trópico); en 1968 Rodolfo fue contratado como empleado de planta en el subprograma de maíz para valles altos, donde en los años siguientes su principal función consistió en dar apoyo a los científicos en la capacitación y organización del personal y en la selección de materiales nuevos. “Es una gran satisfacción para mí ver que, después de 45 años de trabajo duro y continuo, las líneas puras generadas en el programa de maíz de valles altos forman parte de más de 30 híbridos comerciales, liberados principalmente por instituciones mexicanas como ICAMEX, INIFAP, COLPOS y varias pequeñas semilleras; estos materiales se siembran actualmente en más de 200,000 hectáreas”, relata Rodolfo al hacer un recuento de su vida laboral en el CIMMYT.

Esperanza empezó a trabajar en el programa de Administración y Servicios a Visitantes en 1974. En 1977 se integró al departamento de Servicios a Visitantes y Conferencia; en 1979 pasó a formar parte del Programa Global de Maíz, primero como secretaria y luego como asistente. “En todo el tiempo que trabajé en el CIMMYT tuve más de 70 jefes. Tuve el privilegio trabajar con los científicos Alejandro Ortega, Gregory Edmeades, Marianne Bänziger, David Bergvinson, John Mihm, Shivaji Pandey, Martha Willcox, Félix San Vicente, y el finado Hugo Córdova, entre muchos otros”, nos contó Esperanza. “Todos mis jefes y mis colegas me trataron siempre muy bien. Tuve la suerte de trabajar en un ambiente muy cordial y me siento satisfecha y contenta al pensar que con mi trabajo contribuí al cumplimiento de la misión del CIMMYT.”

Tanto Esperanza como Rodolfo recibieron muchos elogios y muchos buenos deseos de sus colegas, amigos, supervisores, exsupervisores, y un mensaje de agradecimiento que dio el Dr. Félix San Vicente en nombre del Dr. B.M. Prassana, director del Programa Global de Maíz. A ambos se hizo entrega de una placa conmemorativa y algunos obsequios; Rodolfo recibió además una placa especial de sus compañeros del programa de maíz de valles altos.

¡Nuestros mejores deseos para Esperanza y Rodolfo!