El Departamento de Desarrollo Internacional del Reino Unido (DFID) gana premio a la Mejor Innovación Tecnológica durante la Semana del Clima celebrada en Gran Bretaña, por su patrocinio al proyecto “Maíz tolerante a sequía para África” (DTMA, en inglés). La premiación se llevó a cabo en la Semana del Clima, en Londres, el 12 de marzo, para hacer un reconocimiento a las organizaciones, comunidades y civiles emprendedores y sus iniciativas para combatir los efectos del cambio climático.
Conocido como “Maíz tolerante a sequía para África” (DTMA, en inglés), por medio de esta iniciativa se han generado 34 variedades nuevas de maíz tolerante a la sequía para agricultores en 13 países donde se realiza el proyecto—Angola, Benín, Etiopía, Ghana, Kenia, Malawi, Mali, Mozambique, Nigeria, Tanzania, Uganda, Zambia y Zimbabwe— entre 2007 y 2011. Se estima que 2 millones de pequeños agricultores están sembrando esas variedades y que han elevado sus rendimientos, mejorado su seguridad alimentaria y aumentado sus ingresos.
En un continente donde el maíz es la base de la alimentación de más de 300 millones de personas y su producción depende casi siempre de que llueva. Las variedades del DTMA, mejoradas con métodos convencionales, ofrecen la posibilidad de aumentar los rendimientos —en comparación con las variedades comerciales— en condiciones moderadas de sequía, y de obtener una cosecha abundante cuando hay buenas lluvias. El DTMA trabaja con una red de diversos colaboradores para generar, comercializar y distribuir semilla; entre sus colaboradores se cuentan empresas privadas, sistemas de investigación y extensión del sector público, ministerios de agricultura, ONG y productores de semilla comunitarios.
DTMA es implementado por CIMMYT y el Instituto Internacional de Agricultura Tropical (IITA); actualmente es patrocinado por la Fundación Bill & Melinda Gates, y también recibe fondos de la Fundación Howard G. Buffett y de la Agencia Estadounidense de Desarrollo Internacional. Además, las actividades del proyecto a largo plazo se basan en el apoyo que durante mucho tiempo ha recibido de la Agencia Suiza para la Cooperación y el Desarrollo (SDC), el Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo (BMZ), el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (IFAD), la Fundación Rockefeller (RF), USAID, el Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas (UNDP) y la Fundación Eiselen.