
Un padre enseña, cría, guía y te acompaña en la vida. En el marco del Día del Padre celebramos a todos los padres que con amor educan a sus hijos, y también recordamos a todos aquellos que ya no están presentes, pero siempre tendrán un lugar en el pensamiento y corazón de sus hijos e hijas, y seres queridos.
Padres que no solo fueron el pilar de un hogar, si no, que también fueron personas ejemplares para su comunidad, como el productor Anastasio Martínez, a quien recordamos con mucha estima. “Don Tacho” (como era conocido), fue el primer productor – colaborador en la comunidad de El Encierro, San Pedro Pochutla, Oaxaca.
Un productor innovador y proactivo, quién sembraba maíz, frijol, girasol, entre otros cultivos. Don Tacho comenzó innovando con prácticas como la agricultura de conservación, la no quema y el manejo agroecológico de plagas.

“Mi papá empezó con el ingeniero Omar Sánchez a innovar. Antes nada más recogía una media tonelada por hectárea, con las nuevas prácticas subimos de media tonelada a cinco por año” comenta Álvaro Martínez Santos, hijo de Don Tacho.
Don Tacho inculcó en su hijo el conocimiento y la motivación para aplicar dichas prácticas. Y actualmente, Álvaro siembra maíz y girasol en sus parcelas, y continúa implementando estas prácticas innovadoras. “Yo quiero seguir en el campo, porque eso fue lo que me enseñó mi papá. Quiero llegar a sembrar unas tres, cuatro hectáreas.” agrega Álvaro.
Álvaro y su familia siguen honrando la labor que Don Tacho inició, con el respaldo del equipo técnico y a través del modelo del Hub desarrollado por el CIMMYT y su red de colaboradores en el estado de Oaxaca.